DECLARACIÓN EN APOYO A PDVSA

En el marco del I Taller Región Oriental hacia la construcción de Universidades Politécnicas, nosotros el colectivo directivos de instituciones, profesores (as), estudiantes, empleados (as), obreros, artistas, creadores e innovadores y miembros de consejos comunales de Ciudad Bolívar, luego del proceso de discusión que el tema amerita, queremos dejar por sentado nuestra posición sobre las agresiones que nuestro país viene siendo objeto por parte de empresas trasnacionales, específicamente la EXXON-MOBIL. Sobre ese particular consideramos:
1.- El Gobierno del presidente Hugo Chávez Frías actuó de manera legítima, según principios elementales de soberanía Nacional consagrados en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, al expropiar acciones de la norteamericana Exxon – Mobil, al igual que de otras trasnacionales, en la antigua empresa petrolera Cerro Negro, actualmente Petropiar.
2.- Con este hecho, incuestionablemente nacionalista, preservador de nuestras riquezas y por ende del recurso energético más importante del planeta, Petroleros de Venezuela – PDVSA- pasó a ser socio mayoritario en todos aquellos campos, supuestamente “maduros” o agotados, entregados al capital extranjero durante los últimos años de la cuarta república.
3.- Con la llamada “apertura petrolera”, llevada a efecto en varias fases durante el segundo gobierno del presidente Rafael Caldera, se dio inicio al desmontaje de la nacionalización efectuada a costa de grandes sacrificios a mediados de la década de los setenta. A tal efecto, gerentes de la misma empresa estatal y subsidiarias, dejados ex profeso por las empresas extranjeras, entre ellas la Exxon – Mobil, en convivencia con políticos ligados a partidos del puntofijismo, se prestaron para regresar nuevamente a las trasnacionales en condiciones sumamente desventajosas, lo que tanto había costado, usando subterfugios y rendijas de la legislación vigente para ese momento.
4.- La llegada al poder del presidente Hugo Chávez Frías permitió no solo el rescate de nuestro recurso básico sino también la paralización de otras entregas ya previstas por el capital trasnacional y los cipayos nacionales, entre ellas el gas, campos petroleros ubicados en la faja del Orinoco, así como la explotación del petróleo pesado en esa misma área, denominada en aquel momento por conveniencia “Faja Bituminosa del Orinoco”. Todo con el claro objetivo de apropiarse de las riquezas para beneficio del imperio y para terminar de quebrar a la OPEP a causa de la baja de los precios del barril por sobreoferta de crudo en el mercado; los cuales fueron reivindicados en el gobierno revolucionario.
5.- No tiene la norteamericana Exxon – Mobil, ni las otras trasnacionales, autoridad moral ni ética para demandar o cuestionar al estado Venezolano por ejercer un acto de soberanía que además reivindica a nuestro pueblo y busca cobrar los excesos cometidos por ese capital en contra de la sociedad, la economía, la cultura y la ecología víctima de los continuos derrames, uso de sustancias tóxicas y envenenamiento de suelos, aguas y de áreas sensibles como los morichales. Sobre este último aspecto bueno es recordar los antecedentes de la misma EXXON a nivel mundial, específicamente en el desastre del EXXON Valdez, así como los ataques de esta empresa al Acuerdo de Kyoto, buscando en todo momento apuntalar los argumentos de los EEUU en contra del convenio y la reducción de los gases contaminantes.
6.- Lejos de amilanarnos, acciones como la adelantada por la EXXON templarán más nuestra condición revolucionaria porque entendemos que detrás de esa supuesta jugada jurídica en pro de la obtención de compensaciones económicas está la familia Bush y el imperio pretendiendo doblegar nuestro destino y decisión de ser libres.
Con base en lo anterior creemos necesario denunciar el trasfondo político de la demanda incoada por la trasnacional norteamericana EXXON MOBIL, instrumento del imperio, por cuanto, la misma no tiene razón de ser dada la solvencia económica de nuestra empresa petrolera demostrada en innumerables juicios. Asimismo, solicitamos la apertura de expedientes y en consecuencia sean sometidos a juicio todos aquellas personas que tuvieron que ver con la “apertura petrolera” y la entrega del recurso en condiciones que permitieron las actuaciones de empresas como la citada y su facultad de entablar juicios fuera del país, en las condiciones por ellos fijadas.